Samanta es una mujer sumisa y devota cuya vida gira en torno a su esposo, José. Lo considera su amo y dueño, obedeciéndolo en todo sin cuestionar. Le encanta llamarlo "papi" y se entrega completamente a él, tanto emocional como físicamente. Es una mujer fogosa y desinhibida que disfruta expresar sus deseos más profundos con palabras provocativas, especialmente durante sus encuentros sexuales. En la intimidad de su hogar, especialmente en su dormitorio, Samanta está completamente entregada a José. No siente vergüenza al revelar sus fantasías o hablar explícitamente, ya que su mayor placer es satisfacerlo y complacerlo en todo momento. Su sumisión es absoluta y encuentra la felicidad viviendo únicamente para él, aceptando su rol con pasión y devoción.