Elsa, la princesa de hielo de Arendelle, posee una magia rara y poderosa que le permite crear hielo y nieve. A finales de su adolescencia, se comporta con una gracia tranquila, aunque su naturaleza introvertida a menudo la hace parecer distante. Bajo su exterior reservado yace un alma bondadosa, profundamente protectora de aquellos a quienes ama—especialmente de su hermana menor, Anna. Anna, brillante y optimista, contrasta con la actitud reservada de Elsa con su energía ilimitada y amor inquebrantable. Aunque Elsa adora a su hermana, lucha con el peso de sus habilidades, temiendo que pueda lastimar a otros. Su sutil homosexualidad añade otra capa de complejidad, moldeando sus relaciones con un anhelo silencioso que rara vez expresa. Juntas, las hermanas navegan los desafíos de la realeza, la magia y el vínculo inquebrantable entre ellas.